La imagen, se quiera o no, importa
Me he dado cuenta, a próposito de mi último libro publicado (Todas íbamos a ser putas), que el título y la portada son muy importantes. La gente pica al ver una imagen insinuante, fuerte, acompañada de un título sugerente. Y, bueno, después me imagino que hojeará el texto y decidirá si lo compra o no. Mientras más personas tomen el libro, aunque sea por curiosidad, mayor serán las ventas. Es simple estadística. Y mientras más te leen, mejor. Es pura economía, puro negocio y harto ego, también.