Página en blanco
martes, enero 31, 2006
  sin merecerla
sin merecerla

no debiera sorprenderme
en el fondo siempre he sido
un imbécil
egoísta
indolente
ella se está esfumando
y yo
como mero espectador de cine
bostezo
ella se cae a pedazos
y mis manos siguen en los bolsillos
¿acaso espero un milagro?

su sonrisa ya no existe
ahora sólo una línea cruza su cara
anémica
huesuda
opaca
de sus ojos mejor no hablar

y yo
muy bien
me rasco la nariz
estornudo
me quejo de una inexistente gripe
mientras ella
sin merecerlo
va desapareciendo
y yo
inmóvil
la miro y
sin merecerla
la tengo a mi lado

 
miércoles, enero 25, 2006
  arena procesada

arena procesada

es riesgoso que conduzca el auto si ando deprimido
manejando es cuando más me desdoblo
y el auto se las bate solo
como los caballos de paseo que hay en las playas

dos veces he chocado
–no es un mal registro–
y esos choques avalan lo que he dicho

el estar deprimido es desdoblarse
–no explicaré eso–
y si me subo a mi auto en ese estado
miro el parabrisas a la pasada
como si fuera una ventana
–de hecho lo es–
y luego miro dentro del vidrio
y entro en él
y me veo frente al volante
y noto mi cara de nada
de inminente suicidio
y me doy lástima
entonces lucho por no volver y quedarme atrapado ahí
entre la arena procesada

un día de estos lo lograré
y obviamente voy a morir
pero en realidad me habré salvado
sólo espero que el parabrisas no quede muy mal
desdoblarse a pedacitos no debe ser muy grato
 
sábado, enero 14, 2006
  6 años

A los seis años juro que me creía Ultraman. Y los árboles del pasaje de tierra eran los monstruos y yo los pateaba con fuerza. A los seis años sólo pensaba en cómo rellenar de diversión cada segundo de mi vida. Jugar a la pelota me ayudaba mucho en eso, me lo pasaba horas enteras junto a mis amigos corriendo detrás de la de cuero. A los seis años pensaba que las niñas eran fomes: corrían despacio y eran muy delicadas. A los seis años estaba convencido de que Pinochet era una especie de rey y que ser comunista era peor que ser delincuente. A los seis años mi vecino cultivaba marihuana por montones y eso me provocaba inquietud. "Los marihuaneros" me daban algo de miedo; en cambio los borrachos me parecían graciosos. A los seis años era flaco como un silbido y muy enfermizo. A los seis años aprendí a leer. Eso, de cierta forma, me salvó.
graciosos
 
jueves, enero 05, 2006
  torturador a la vista

torturador a la vista

un desvío de mirada
la cabeza gacha
alguien diría que estás arrepentido
alguien que no sepa que
los muertos los secos
no miran hacia atrás

no son búhos
son aves de carroña
que ahora vuelan bajo
casi a ras de suelo
tampoco es vergüenza
es cobardía
ya no tienes un garrote en la mano
ni yo estoy amarrado a una silla
 
Bitácora de vuelo de un aspirante a escritor (y ser humano)

Mi foto
Nombre: roberto fuentes

Nada. Sólo soy un escritor.

Archivos
junio 2005 / julio 2005 / agosto 2005 / septiembre 2005 / octubre 2005 / noviembre 2005 / diciembre 2005 / enero 2006 / febrero 2006 / marzo 2006 / abril 2006 / mayo 2006 / junio 2006 / julio 2006 / agosto 2006 / septiembre 2006 / octubre 2006 / noviembre 2006 / diciembre 2006 / enero 2007 / marzo 2007 / mayo 2007 / julio 2007 / abril 2008 /


Powered by Blogger

Suscribirse a
Entradas [Atom]